"Ayer" paseé por la playa a las 2 de la madrugada, cuando había dejado de llover. Sentado en el banco de enfrente de los relojes de la Concha, había un hombre que escribía en un banco. ¿Habéis oído hablar de un poeta que se pasa todos los veranos con su puesto de poesías en la bahía? Algún día os hablaré más de él. Es un personaje extravagante y misterioso, que se pasa las horas viendo cómo la gente se acerca y lee sus poesías. Y escribe… parece que lo que le gusta en realidad es montar su escenario y contemplar las caras de los viandantes… es uno de los elementos más especiales del paisaje en verano, sin duda. Pero del escritor que os hablo no tiene nada que ver con él… era un hombre normal y corriente, ni siquiera tenía algo que llamara especialmente la atención; de esas personas que pasan del todo desapercibidas, que simplemente están ahí… Éste fumaba, miraba la bahía y escuchaba algún tipo de música…
3 Comments:
Hola pekeño animalín:
Como no te crees que te voy a escribir mañana por la mañana, te hago un avance ahora. Son casi las dos de la maldita madrugada, hace un calor infernal en esta ciudad infecta y estoy borracho hasta las trancas de vino. ¿Sabes? Disfruto de verdad leyéndote. Con algunos párrafos del blog se me ha puesto la piel de gallina. No hay mujer más interesante que la que sabe contar una historia. Y tu lo haces realmente bien.
Hoy he tenido un día de mierda, de esos en los que cada minuto pasa como una vida entera, y al ver la ilustración del paseo de La Concha me ha entrado una insoportable morriña. ¿Qué hago yo aki? ¿Por qué no estoy sentado en el malecón de Zarautz escuchando como rompe el mar en las noches de final de verano? No me gusta lo rápido que cambian las cosas. Necesito hundir los pies en la arena y no pensar en nada y pensar en todo a un tiempo.
He tenido tan mal día que creo que me voy a salir a la terraza, voy a encender un par de velas y voy a desenpolvar Las flores del mal, de Baudelaire y me voy a empapar un poco de poesía maldita con la última copa de vino, hasta que me duerma. Mañana será otro día.
¿Te he dicho ya lo mucho que me gusta cómo escribes? Será un placer seguir leyéndote y contestar cuando se vaya la nube que no me deja distinguir demasiado bien la realidad.
Quizá me plante un CD de los Doors, es un buen momento, ¿no crees? Buenas noches Belén, que duermas bien. Belén es un nombre especial. Mi hermana se llama Belén. Y la mujer que me atormenta las neuronas en este momento también se llama Belén. Me voy a charlar un rato con el señor Morrison sobre la importancia de llamarse Belén.
Hasta mañana señorita.
Hola perrilla,
Ya estamos aki, a la carga otra vez. He dormido como el culo pero ya estoy bien despejado y lo veo todo mucho más claro... Aunque sigo mirando los apuntes y no entiendo nada de lo que dicen porque aún tengo la cabeza en otro sitio. Esto se merece un café urgente. ¿Por qué resulta tan difícil estar a gusto, sin complicaciones? Quiero a alguien que me complemente y le guste estar conmigo. ¡Qué veranito!
Para este momento de mi vida hay una canción q es mi banda sonora del día a día, deberías escucharla, se llama I hate myself for lovi´ng you, de Joan Jett. Ya me comentarás que te parece. Y hay otra tb que escucho mucho: I want you to want me, de Cheap trick.
Belencita...¿qué mierda nos pasa? Me voy a preguntárselo al perro, a ver qué me cuenta él. Es un perro muy sabio el mio, seguro que me puede aconsejar.
Bss
Aunque a los gatos no nos guste demasiado el agua, bajare de mis tejados para pasearme por tus playas.
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